En un artículo anterior tratábamos de las primeras
calles de Villanueva de Córdoba en el siglo XVI y principios del XVII. O mejor
dicho, de las calles que aparecían expresamente citadas en documentos de la
época. Digamos que esa etapa era la infancia del pueblo; ahora, avanzaremos un
poco, y siguiendo con la comparación veremos cuando el pueblo era ya un
zorollo, a finales del siglo XVII.
En el año 1694 Villanueva de Córdoba contaba ya con
837 vecinos, que a razón de 3,7 personas por vecino vendrían a ser unos 3.100
habitantes. Algo imprescindible para aquellas personas eran las viviendas,
obviamente. Algo después, en 1753, se decía en el Catastro de Ensenada que
Villanueva contaba con 875 casas habitadas, para 1.220 vecinos. Con esa misma
proporción, en 1694 podría haber unas 610 casas.
Siendo la población más joven de las Siete Villas de
los Pedroches (pues empezó a poblarse por la década de 1480) su crecimiento fue
muy vigoroso, como se muestra en la siguiente tabla:
Crecimiento de la población de Villanueva de
Córdoba:
Año
|
1529
|
1551
|
1561
|
1594
|
1657
|
1694
|
Vecinos
|
150
|
260
|
330
|
574
|
817
|
837
|
Habitantes
(aprox. 1 vecino = 3,7 habitantes)
|
555
|
962
|
1.221
|
2.124
|
3.023
|
3.097
|
A medida que aumentaba el número de personas que
vivía en Villanueva era necesario ir construyendo nuevos edificios para
albergarlos.
Desde el nacimiento de Villanueva a finales del
siglo XV no hubo ninguna planificación urbanística. Se repartieron solares en el
ejido del pueblo, donde las familias iban construyendo sus viviendas. O ejidos,
pues los documentos de la época nombran al “ejido de la fuente del camino de la
Campiña” (la Fuente de la Estrella actual), al sur, o del “ejido de Juan
Blanco”, al norte. Al principio, estas primeras casas estarían más o menos
aisladas junto a las vías por las que se accedía a casas y solares, agrupándose
y alineándose con el tiempo, con lo cual lo que antes eran caminos y callejones
se convirtieron en los que ya se podían denominar calles, es decir, una vía
pública entre edificios o solares.
Quiero decir con esto que, además de las calles
expresamente citadas que se verán a continuación, podría haber más viviendas
aún dispersas en lo que todavía no consideraban aún calles.
No parece que en principio las nominaciones de las
calles dependieran del Concejo, sino que, plenamente democráticas, el pueblo
las nombraba y sancionaba con su uso (hasta que a partir de 1864 el
Ayuntamiento comenzó a variar los nombres de algunas calles).
Algunos nombres derivaban de los de los caminos que
se convirtieron en calles que se dirigían a otras localidades o sitios:
Pedroche, Pozoblanco, Torno, Conquista, Torrecampo, Ventas…
En otros, procedían de las primeras personas, o las
más relevantes o conocidas, que habitaron en los primeros tiempos en ellas:
Pero Cobo, Juan Blanco, Ana Çid, Palma, Diego Perez, Juan de Lope, Contreras,
Cañuelo.
La topografía, o algún elemento particular
distintito, nominaba a otras calles: Alto del Santo, Fuente Vieja, Empedrada, Alta,
Cerro, del Pozo, Herradores, Parralejo, Moral…
Para conocer las calles que existían en 1700 hemos
recurrido a las actas capitulares del Concejo de Villanueva. En esa época las
Siete Villas de los Pedroches pertenecían al señorío del Marqués del Carpio.
Este, o su representante, nombraban anualmente los cargos del Concejo, y, a
veces, junto al nombre, quizá para identificarlo o distinguirlo mejor de otro
homónimo se anotaba la calle donde vivía. Este es, por ejemplo, el nombramiento
de 1686: “Por quanto para el
buen govierno y administrazion de justizia de la villa de Villanueva de Cordova
conviene hazer elecciones de ofiziales por tiempo de un año mas o menos lo que
fuera la voluntad del dicho Sr. Marques o la mia en su nombre, por la presente
usando del dicho poder nombro por Alcaldes Ordinarios a Bartolome Sanchez
Fresco, Fuente de Juan Blanco, y Anton Martin de Castro Serrano; por Regidores
a Mathias Garzia Moreno y Andres Fernandez Romero, Pozo del Brocal; por
Alguazil Mayor de la villa a Martin Garzia Molinero Tamaral, calle Torrecampo;
por Alcaldes de la Hermandad a Pedro Martin Pozuelo y Pedro Muñoz Barvero; por
Alguazil Mayor de ella a Josef Fernandez Fresco, calle Pozoblanco; por
Procurador Sindico Francisco Ruiz Cano; por Mayordomo de Propios a Pedro Lopez
Rico, calle Real; por Padre de Menores a Anton Martin Serrano el Mayor; por
Fiscal a Pedro Sanchez Torralvo, calle Ana Zid; por Procuradores de Causas a
Baltasar Lopez y Francisco de Contreras...”. Se nombran las
calles Fuente de Juan Blanco, Pozo del Brocal, Torrecampo, Pozoblanco, Real y
Anacid
Hemos estado revisando las actas capitulares de 1684-1700 (de este periodo se han conservado de muy pocos años) buscando las calles que se nombraban en ella, y hemos encontrado 31 en total. No creo que fueran todas, pues consta la calle Juan de Lope, pero parece raro que no existiera la calle Navas, que está inmediata a ella y por la que se accede a Juan de Lope desde la plaza. Tampoco se cita en la documentación la calle del Cuartel (luego calle Tetuán, y actualmente calle Córdoba), cuando sabemos que el cuartel del ejército ya estaba en esta calle a finales del siglo XVII.
De todas formas, sirve para hacernos una idea de la
evolución urbana en el siglo XVII.
Lo que es evidente al ver el plano que se adjunta es
que desde los inicios el centro urbano fue la plaza, desde comenzaron a surgir
las primeras calles, en principio los caminos que iban a distintas localidades.
El camino que iba desde Pedroche al real de la Plata fue el origen del
poblamiento, e inmediatos a él se construyeron los primeros edificios comunales
religiosos (la iglesia de San Miguel ya estaba en 1500, y la ermita de San
Sebastián en lo Alto del Santo en 1534).
El núcleo inicial se fue consolidando al norte y este
de los caminos a la campiña y Pedroche. Las calles María Cristina y Pozo,
paralelas al camino a la campiña, parecen haber sido en sus comienzos
callejones para articular y comunicar los solares y casas entre este camino y
la Fuente Vieja. Desde aquí siguió la urbanización al norte, hacia los caminos
a Conquista y Torrecampo, uniéndose la Fuente Vieja con la Fuente de Juan Blanco.
Pero aun en 1700 no aparecen la calles Casas Blancas, Cañadas o Ventura,
tradicionalmente consideradas las más antiguas. Ello no quiere decir que no
existieran, pero expresamente nombradas no están. Podría haber más viviendas,
aun aisladas, con un número escaso como para ser consideradas calles, como en la
Cruz de Ventura.
Calles de Villanueva de Córdoba en 1684-1700. (Junto
a ellas está el año en que se nombran por primera vez en documentos de Concejo
local. Las que no tienen año son las citadas antes de 1615. Entre paréntesis,
el nombre actual)
Calle Real
Plaza
Alto del Santo
Calle Pedroche
Calle Pozoblanco
Corral de Concejo
Calle de Pero Cobo (Cervantes)
Calle Empedrada
Fuente Vieja
Calle de las Ventas / calle de San Gregorio
Calle del Torno
Fuente Juan Blanco
Cruz del camino de la Campiña (Córdoba)
Calle Ana Cid
Calle la Palma
Calle de Diego Pérez (María Cristina) 1684
Calle del Cerro 1684
Calle del Pozo del Brocal 1686
Calle Torrecampo 1686
Calle Herradores 1687
Calle Conquista 1688
Calle Alta (Hermanos Martos) 1688
Calle Jetones (Bailén) 1689
Calle de Juan de Lope 1689
Cruz de Conquista (Cruz de Piedra) 1689
Callejón del Moral 1698
Calle Juan Blanco 1698
Calle Cepas (Manuel Ayllón) 1698
Calle Parralejo 1698
Calle Contreras 1700
Cruz de Cañuelo 1700
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